La humanidad dio un gran salto hacia la longevidad cuando se encontró tratamiento a muchas de las enfermedades cardiovasculares que acechan comúnmente a la población. Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de deceso en el mundo, de hecho, el infarto al corazón  (médicamente conocido como “infarto agudo al miocardio”) es la principal causa de muerte en México y en el mundo.

Se estima que un 30% de las personas que experimentan un infarto agudo al corazón muere en el momento que se le presenta, por lo cual, lo único que se puede hacer al respecto es prevenirlo. Entonces, es conveniente que toda la población, así esté en edad joven, conozca, ¿Cuáles son las causas del infarto? ¿Qué síntomas se presentan ante un infarto? ¿Cómo podemos prevenirlo?

Presenta el Dr. Juan Pablo Ledesma Heyer, Médico Internista y Geriatra. Para responder a estas preguntas nos acompaña el Dr. Daniel Escobar Gutiérrez, quien además de Médico cuenta con la Especialidad en Cardiología y Electrofisiología, y una amplia experiencia en clínica. Foto de 65ymas.com

Índice

¿Qué es el infarto agudo al miocardio?

Lo que conocemos comúnmente como “infarto del corazón” no es más que una obstrucción de las arterias coronarias (las arterias que llevan sangre al músculo cardíaco) provocando una falta de oxígeno al músculo del corazón, lo que compromete seriamente su función.

¿Cuáles son los factores de riesgo para presentar un infarto al corazón?

Existen varias causas que aumentan la probabilidad de un infarto al corazón:

  • Exceso de colesterol
  • Diabetes mal controlada
  • Edad avanzada
  • Acumulación de calcio en las coronarias
  • Triglicéridos altos
  • Tabaquismo (entre más se fuma, mayor el riesgo de infarto al corazón)
  • Herencia (si tenemos padres o familiares cercanos que han presentado un infarto, tenemos mayor riesgo)
  • Sobrepeso y obesidad
  • Hipertensión
  • Consumo de drogas estimulantes como la cocaína

¿Qué síntomas se presentan ante un infarto?

Es común que se sienta una sensación de opresión en el pecho, falta de aire, palpitaciones, mareos o sensación de desvanecimiento. Ante estos síntomas es importante que la persona acuda de inmediato a urgencias. Sin embargo, en mujeres, personas diabéticas y en personas de edad avanzada los síntomas pueden ser distintos: algunos pueden únicamente sentir falta de aire, sudoración, ansiedad, taquicardia o incluso un dolor en el epigastrio (que se siente comúnmente ante la presencia de gastritis o reflujo).

En el hospital, lo primero que se debe hacer ante la sospecha de infarto, es un electrocardiograma. Este estudio puede reflejar la presencia de un infarto.

Ante la sospecha de un infarto ¿hay algo que pueda hacerse en casa antes de llegar al hospital?

Desafortunadamente no puede hacerse mucho, lo ideal es buscar atención médica de inmediato. No obstante, en personas con factores de riesgo puede ser conveniente tomar una aspirina de 325 mg y llevar de inmediato al hospital. Es muy recomendable que toda persona, y en especial si vive con personas que tienen riesgo de infarto o que han padecido un infarto, conozcan técnicas de reanimación cardiopulmonar. Lo anterior podría salvarle la vida mientras llega la ayuda médica.

¿Qué se hace en el hospital para tratar un infarto y cómo puede prevenirse?

El tratamiento dependerá del lugar en el que se esté atendiendo al paciente y del equipo con el que cuenten. Una de las formas de tratarlo rápidamente es mediante la trombólisis, que consiste en aplicar un medicamento especial para deshacer el coágulo que está bloqueando el flujo de sangre al corazón. Este procedimiento es muy útil cuando el paciente todavía debe trasladarse a un hospital donde le puedan realizar un cateterismo cardíaco, un estudio más complejo e invasivo que permitirá observar la anatomía del corazón y de las arterias coronarias.

Como ya se mencionó, una vez que se desencadena el infarto, no hay mucho que hacer más que buscar ayuda médica de urgencia. Por lo tanto, para prevenirlo lo más importante es evitar tener factores de riesgo (mencionados arriba), y de tenerlos inevitablemente (por ejemplo, cuando tenemos herencia de infarto), lo más conveniente es realizarse como rutina un electrocardiograma (que es bastante barato) junto con un chequeo médico periódico.

Si ya sufrimos un infarto ¿es posible recuperar nuestra vida normal?

Desde luego que sí. Lo importante es dar seguimiento con el cardiólogo para ver cómo va mejorando la función cardiaca. Será éste quien de acuerdo a una valoración pueda ir indicando en qué momento se pueden retomar o iniciar tales o cuales actividades.

Conclusión

El infarto al corazón es la mayor causa de muerte en el mundo. De ahí la importancia de que toda la población, sin importar la edad, conozca los síntomas de un infarto y sobre todo, la manera de prevenirlo. Los malos hábitos de vida, incluyendo el tabaquismo, el consumo de sustancias estimulantes, así como la dieta inadecuada y el sedentarismo (que llevan a tener  sobrepeso u obesidad y otros problemas de salud) pueden evitarse y disminuir significativamente el riesgo de padecer un infarto.

No está demás que todos, y particularmente las personas que tienen factores de riesgo, se realicen un chequeo médico periódico para detectar cualquier alteración cardíaca, además de conocer maniobras de reanimación cardiopulmonar, que son relativamente sencillas y pueden hacer la diferencia entre la vida y la muerte cuando se presenta un infarto.

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