Los Centros de Día son espacios que ofrecen a las personas adultas mayores alternativas para ocuparse creativa y productivamente en su tiempo libre. Son lugares donde se realizan actividades culturales, recreativas, deportivas, ocupacionales, formativas y de desarrollo. En algunos centros se ofrece también la opción de educación básica, para aquellos adultos mayores que no sepan leer ni escribir, así como capacitación gerontológica, servicios médicos, de nutrición, comedor e incluso transporte.
«Lo importante para un centro de día es que la persona mayor esté motivada a asistir, que disfrute su estancia en él y que represente una oportunidad para mejorar su calidad de vida»
Entonces, ¿Cómo opera un Centro de Día? ¿Cómo se puede promover que los adultos mayores asistan? ¿Cuáles son los beneficios de asistir a un Centro de Día?
Presenta el Dr. Juan Pablo Ledesma Heyer, Médico Internista y Geriatra. Para responder a estas preguntas nos acompaña la Lic. En Psicología Melis Vidrio, con amplia experiencia en el ámbito de la Tanatología y Gerontología, así como en atención a adultos mayores en Centros de día. Imagen de Chapultepec Guía Turística
Índice
- ¿Cómo opera un Centro de Día?
- ¿Cómo se puede promover que los adultos mayores asistan a un Centro de Día?
- ¿Cuál es el beneficio de estar en un Centro de Día?
- ¿Cómo regresan los adultos mayores después del aislamiento por la pandemia por COVID 19?
- Conclusión
¿Cómo opera un Centro de Día?
Por lo general, se procura que al inicio del día se les provea de un desayuno, luego que hagan actividad física y fisioterapia, actividades para estimular las capacidades cognitivas, y que se den momentos para socializar y recrearse (juegos de mesa, baile, entre otros). Dependiendo del tiempo que pasan ahí, se pueden también ofrecer más comidas y colaciones, siempre con apego a la guía de un profesional en nutrición.
Desde luego que las actividades y atenciones en un centro de día tienen que ser personalizadas: según las capacidades y habilidades de cada persona (que deben evaluarse desde un principio) para sacar el mejor provecho posible. El objetivo final del centro de día es que el adulto mayor se mantenga activo y saludable
“no queremos que nuestro adulto mayor esté todo el día frente a un televisor, o encerrado y aburrido entre cuatro paredes, eso no le ayuda, tienen que estar activos”
¿Cómo se puede promover que los adultos mayores asistan a un Centro de Día?
Lo primero que hay que tener en cuenta, es que asistir a un centro de día no significa que “mis hijos ya no quieren estar conmigo” o al contrario, “no quiero que mis padres asistan a un centro de día porque no quiero que piensen que no los quiero atender”. El propósito de un centro de día es el bienestar del adulto mayor, que esté activo y que se relacione con otros. Entonces, así como los padres se ponen a evaluar qué escuela es la mejor para sus hijos, lo mismo cuando se trata de un centro de día, es por el bien de ellos y al final, por el bien de todos.
Es importante mencionar que los centros de día son lugares seguros (o deben serlo): los adultos mayores nunca se quedan solos. Hay también oportunidad de que tengan atención profesional para su salud: normalmente se cuenta con la atención de nutriólogos, psicólogos, geriatras, fisioterapeutas, entre otros, así como con el apoyo de maestros y guías espirituales. Por lo tanto, un centro de día ofrece atención integral y segura para el adulto mayor, basta con darles la oportunidad o animarles a asistir, y que ellos vean por sí mismos cómo se sienten y se desarrollan.
¿Cuál es el beneficio de estar en un Centro de Día?
Los centros de día buscan atender todas o casi todas las necesidades que tienen las personas para estar plenas: desde la salud física hasta el ámbito espiritual y emocional.
“Es muy importante centrarse en el aspecto espiritual y buscar además el bienestar psicológico, que se le ayude al adulto mayor a sanar aquellas heridas o traumas de su pasado” señala la Lic. Melis Vidrio.
Adicionalmente, se hace enfoque en la cultura de la prevención, procurando actividades y rutinas de alimentación que deriven en una mejor salud y una mayor autonomía.
La Lic. Melis también nos comenta acerca de lo relevante que es para un adulto mayor el convivir con personas de su edad:
“la mente se reactiva y se agiliza, ahora se sabe que las neuronas pueden formar nuevas sinapsis a través de la socialización”.
Además, para complementar este apartado, un artículo de revisión del año 2017 (Ellen et al. 2017) en el que se proponen analizar diversos artículos sobre las consecuencias que tiene para un adulto mayor y sus cuidadores el acudir a un centro de día, se encontró que casi todos los participantes muestran un impacto positivo sobre su calidad de vida al acudir a un centro de día: tanto en el aspecto de salud física, como social, psicológico y conductual. Además, tanto las personas que acudían al centro de día como sus cuidadores estaban muy satisfechos con los servicios otorgados.
¿Cómo regresan los adultos mayores después del aislamiento por la pandemia por COVID 19?
Desafortunadamente, en muchos casos, adultos mayores que mostraban mucha mejora en cuanto a autonomía y salud al asistir a un centro de día, después del periodo de aislamiento tienen una reversión importante e incluso un deterioro significativo en su salud física y mental.
Además, muchos adultos mayores, al estar encerrados, ven más televisión, muchas veces noticias que les hacen preocupar y poner ansiosos. Está bien estar informados, pero llega un punto en que es un exceso que deriva en miedo y malestar. Afortunadamente, se están abriendo nuevamente estos espacios y poco a poco, las cosas vuelven un tanto a la normalidad, esto nos alegra a todos porque significa volver a salir de casa, a convivir.
Conclusión
Los centros de día son espacios diurnos en los cuales se ofrece a los adultos mayores la oportunidad de realizar diferentes actividades recreativas, culturales, de aprendizaje, socialización, de apoyo psicológico, espiritual y más, con la finalidad de preservar (o mejorar) su autonomía, así como su salud física y mental a través de un enfoque de atención integral.
Los centros de día no son asilos, ya que los adultos mayores al final del día (y los fines de semana) regresan a sus casas. Además, la atención es personalizada de acuerdo al estado del adulto mayor: no importa si padece algún tipo de demencia o una enfermedad crónica que le hace dependiente, o si está completamente sano, la atención será de acuerdo a cada caso, según sus necesidades.
En general, los centros de día son espacios seguros y con personal capacitado, cuya finalidad última es el bienestar de la persona mayor, y que además han demostrado mejorar su calidad de vida así como la de sus familias y cuidadores.
REFERENCIA
Ellen et al (2017) Adult Day Center Programs and Their Associated Outcomes on Clients, Caregivers, and the Health System: A Scoping Review. The Gerontologist. Vol. 57, No. 6, e85–e94 doi:10.1093/geront/gnw165