Los cuidados paliativos se refieren a todas las acciones encaminadas a paliar o hacer más soportable los síntomas o signos de una persona que padece una enfermedad grave. Son la opción de atención a un paciente al cual se les diagnostica una enfermedad que es de difícil tratamiento o que no tiene cura como tal, un ejemplo son las enfermedades neurodegenerativas como la de Parkinson o Alzheimer, o el cáncer en etapas avanzadas.

Cuando se plantean estos cuidados, no significa que se va a desahuciar a la persona, hay muchas medidas que se pueden tomar para retrasar el avance de la enfermedad o para tratar sus síntomas, de manera que el enfermo tenga una mejor calidad de vida. 

Entonces  ¿Qué significa que se requieran cuidados paliativos? ¿Cómo se aborda el tema de cuidados paliativos con el paciente y los familiares? ¿Cuáles son ejemplos de cuidados paliativos? ¿Qué significa el encarnizamiento terapéutico? 

Presenta el Dr. Juan Pablo Ledesma Heyer, Médico Internista y Geriatra. Para responder a estas preguntas nos acompaña la Dra. Isadora Peña Ibarra, Médico Geriatra, con amplia experiencia tratando adultos mayores y a sus familias, Especialista en Trastornos de Movimiento y Directora de Intelecto, un Centro de Rehabilitación Cognitiva en la ciudad de Guadalajara. Imagen tomada de piqsels

Índice

¿Qué significa que se requieran cuidados paliativos?

Plantear la opción de cuidados paliativos a una persona con una enfermedad que no puede curarse, no significa que viene la muerte inminente. Hay personas que pueden vivir 5, 10, 15 años o más con una enfermedad incurable (aún si fueron diagnosticadas en la vejez), contando con los cuidados necesarios. Lo más importante es que la persona tenga calidad de vida, que no sufra dolor ni ningún otro problema de salud físico o emocional que cause molestias evidentes. 

¿Cómo se aborda el tema de cuidados paliativos con el paciente y los familiares?

Lo primero es preguntar al paciente y familiares si saben acerca de la enfermedad que padece, su pronóstico y hasta qué punto afecta su salud. Es importante que estén conscientes de lo que implica su enfermedad. Hay situaciones en las que el paciente desea no saber o no enfrentar conscientemente su enfermedad, en cuyo caso sigue siendo importante que la familia o cuidadores cercanos sí tengan dicho conocimiento. El médico en todo momento debe orientar y acompañar al paciente, además de dar las opciones de cuidados paliativos. Al final, siempre será una decisión personal del paciente el aceptar o no, y hasta qué punto.  

¿Cuáles son ejemplos de cuidados paliativos? 

Cuidados paliativos puede significar, por ejemplo, la aplicación de diálisis periódicas en personas con insuficiencia renal, cuidar que no se hagan úlceras por presión en pacientes que deben estar en cama, la administración de medicamentos para control de dolor u otros síntomas como reflujo, náuseas o gastritis, el suministro de oxígeno o suero intravenoso, ejercicios de fisioterapia, terapia ocupacional, entre otras. 

Cuidados paliativos también aborda el área espiritual y emocional, pudiendo ofrecerse ayuda psicológica a la persona, la asistencia a grupos de apoyo, el acercamiento a su comunidad religiosa (cuando practican alguna religión), así como la prescripción de medicamentos que puedan ayudar con trastornos de ansiedad, depresión, de sueño, entre otras. 

¿Idealmente, cómo se pueden llevar estos cuidados?

Lo más importante es que se respete la voluntad última del paciente, hay personas, por ejemplo, que deciden pasar sus últimos momentos (cuando ya está muy avanzada la enfermedad) dentro de un hospital mientras que otros prefieren estar en casa. Desde luego, se deben considerar las condiciones económicas y de disponibilidad de la familia para prestar los cuidados necesarios o de pagar a un cuidador formal. Sin duda, puede ser una situación compleja, lo ideal es llevarla de cerca con la orientación de su geriatra y preferentemente, de un gerontólogo y tanatólogo también. Lo importante al final, es que el paciente pueda tener la mejor calidad de vida posible por el tiempo que sea necesario. Es muy importante también la cuestión emocional, promover que la familia  de acompañamiento y cariño, que sean empáticos con ellos. 

¿Qué hay acerca de las voluntades anticipadas?

En todo momento se debe respetar el derecho del paciente a sus voluntades anticipadas, esto es, un documento oficial en el cual pueda anticipar y decidir acerca de los tratamientos que desea o no recibir una vez que se encuentre en etapas muy avanzadas de su enfermedad. 

Las voluntades anticipadas se pueden cambiar si el paciente lo desea, siempre y cuando se encuentre en condiciones de decidir conscientemente acerca de su situación. 

¿Qué significa el encarnizamiento terapéutico? 

Este término hace referencia a las medidas terapéuticas para prolongar la vida del paciente a toda costa, aún si éste se encuentra en condiciones muy desfavorables de salud. Significa hacer todo lo posible para que la persona siga viva sin tomar en cuenta sus propios deseos o la calidad de vida que está teniendo en su condición, aún con medidas paliativas.

El encarnizamiento terapéutico es considerado una conducta inmoral o antiética, aún si en ocasiones los familiares refieren hacerlo «porque no soportan la idea de que la persona ya no esté con vida”. 

Conclusión

Los cuidados paliativos son todas aquellas atenciones médicas, psicológicas y de acompañamiento, que se le brindan a una persona que padece una enfermedad grave, para disminuir, contrarrestar o retrasar los síntomas y signos que vienen con ella. No significa que viene la muerte inminente o que ya no se desea hacer nada por la salud de la persona, sino que tenga la mejor calidad de vida posible (y a veces mayor tiempo de vida) en su condición, se trate de una patología que avanza lentamente o de manera rápida.

Se recomienda que la persona y sus familiares o cuidadores tengan suficiente conocimiento sobre la enfermedad que padece, realizar las voluntades anticipadas, atender todas las áreas de la vida de la persona que pueden verse afectadas en su condición (no únicamente la física, sino también la emocional y espiritual), y que se dé prioridad siempre a los deseos personales del paciente (desde luego, sin dejar de lado las posibilidades de sus seres cercanos o red de apoyo). 

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Rocio Erandi Heyer Osorno- Licenciada En Biología por la Universidad de Guadalajara y Maestra en Ciencias de Comportamiento, con orientación en Neurociencias. Experiencia en trabajo técnico y de investigación en laboratorios de Neurociencia y Biología Molecular. Docente de Universidad. Coautora del libro “La huella del placer: De la regulación a la adicción”.